Deseos para el año nuevo: Quiero más sexo

Llevo días queriendo escribirle algo al año que se va . Una despedida, una carta que meter en un sobre, cerrarlo y echarlo en un buzón. Sin embargo me he encontrado con aquello que llaman los pintores o escritores del folio o lienzo en blanco sin saber que poner.

(El titulo era un simple gancho para captar tu atención jeje. Perdón por acabar aquí sin querer, pero si al llegar al final del relato crees que no te puede servir de nada , también tengo a disposición de quien así lo desee una hoja de reclamaciones)

Por un lado es como si no quisiera que se acabase. Otros años sin embargo me ha inundado esa sensación de querer pasar página y que empezará uno nuevo. Como si enero fuera ese mes  por excelencia en que todo lo que nos proponemos con mucho entusiasmo fuéramos capaces de (esta vez si) cumplirlo. Pero luego llega marzo y aun no hemos tachado ninguna de nuestras propuestas y nos llenamos de frustración. Por eso pienso que hay que ser realista en nuestros deseos y capacidad de realizarlos.

Esto me recuerda a cuando de pequeña jugaba al parchis con mi  primo Carlos. Yo siempre quería ganar pero sin embargo finalmente siempre perdía.

Ganas no me faltaban, pero acababa incluso por enfadarme ya que no entendía porque una y otra vez, que aunque los números que salieran en los dados era puro azar,  no lograba vencerle.

Con los años te acabas dando cuenta de que si tienes un deseo tienes que poner realmente empeño en conseguirlo. Si de niña me hubiera fijado más en su estrategia, en su forma de jugar, y no sólo querer alcanzar la meta, hubiera ganado más de una vez.

*Terminaba con el mismo careto que el gato al que le preguntan si esta enfadado ^^ y encima dice que no jeje

A veces nos fijamos únicamente en nuestro objetivo , pero no nos damos cuenta de que para alcanzarlo tenemos que luchar por ello , y dedicarle tiempo.

Las personas que lograron algo en la vida, no lo hicieron de la noche a la mañana pero estoy segura que habrá gente que las envidiara, anhelando quizás lo mismo. Tal vez tendríamos que preguntarnos si quizás nosotras nos hemos esforzado de verdad en conseguir lo que queríamos o ¿fue un simple deseo?

Este año no me voy a poner metas inalcanzables, que me dejen frustada con mi tablero de parchis debajo del brazo. Voy a intentar alcanzar mi felicidad de una forma racional. En el camino me encontraré con barreras que no me dejaran pasar, habrá momentos en que tendré que volver de nuevo a casa porque me han comido, o permaneceré paralizada por haber perdido mi turno de tirar de nuevo los dados.

Pero cada casilla cuenta, y en la vida como en cualquier otro juego, nunca debes abandonar la partida antes de tiempo, porque hasta en el último momento en que dabas todo por perdido puedes ganar.

Sino recordad aquel mítico partido del 83 entre España y Malta en que a simple vista parecía imposible marcar los 12 goles que hacia falta para clasificarse. Es considerado uno de los encuentros más importantes de la Historia del fútbol.

Yo os pido a todos que si tenéis algún deseo  (por supuesto realista y que dependa únicamente de tu esfuerzo) que creáis que no podéis lograr, mentalmente os acordéis de este hecho. O mejor dicho lo podéis escribir incluso y ponerlo en una nota en vuestra nevera para que no se os olvide nunca.  

De momento yo quiero jugar.

¿Y tu me vas a pedir la hoja de reclamaciones que os he dicho anteriormente o me has cambiado de opinión?

 Cualquiera que sea tu respuesta me encantaria saberla. Si creeis que éste último post que os he escrito para finalizar éste año le puede servir a alguien me encantaria que lo compartierais.

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¡Feliz AÑO!